El objetivo en los próximos meses es entrenarnos en la reflexión sobre cuestiones fundamentales dentro de la filosofía, hacernos con un vocabulario filosófico, ganar en el rigor argumentativo, así como reconocer y leer a filósofos. Todo esto en verdad podríamos decir que es el camino. La meta a la que me gustaría llegar con vosotros es que asumamos voluntariamente el riesgo de pensar nuestro presente, hacernos "contemporáneos" en el sentido en el que lo define Giorgio Agamben en su obra Desnudez: "(...) contemporáneo es aquél que mantiene la mirada fija en su tiempo, para percibir, no sus luces, sino sus sombras. Todos los tiempos son, para quien experimenta su contemporaneidad oscuros". Contemporáneo como aquél que sabe ver en la oscuridad. La oscuridad no supone negación sino que también conlleva una actividad de neutralización de las luces que están cegando en nuestra época para, de esta manera, ser capaces de descubrir su capacidad alienante.
Os animo a asumir el riesgo de pensar como contemporáneos, al modo de Agamben, porque es algo en lo que estamos implicados y que constituye nuestras vidas.
No es tarea fácil, es una cuestión de coraje.
Bienvenidos, amigos en el saber.
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